martes, 11 de enero de 2011

De liebres y tortugas.

Hoy me han mentido. No es la temática en torno a la cual suelen girar mis posts, si es que se puede decir que tengan temática concreta alguna, pero el caso es que, como lo sucedido no me acaba de caber en la cabeza (nótese el juego de palabras), no paro de darle vueltas para ver si encuentro dónde ubicarlo. Hoy me han mentido.


Cuando abrí este blog me propuse varias cosas. A saber:

1- No explicaría nada de mi vida privada, aunque la gran mayoría de los que me leen me conocen de sobras.

2- Me limitaría a, más que reflexionar sobre lo que me parece chocante, divagar.

3- Si tuviera la necesidad de escribir sobre alguna anécdota que me hubiera tocado la moral, lo haría en clave de humor, quitándole hierro al asunto.

4- Otras sandeces que me pienso saltar a la torera porque

Hoy me han mentido. Y mucho. Mirándome a la cara con media sonrisa y apartando la vista cuando el embuste se hacía demasiado evidente.


A lo largo del día llegamos a escuchar tal cantidad de mentiras que parece que lo anteriormente dicho no tenga importancia. Existe la mentira piadosa, de obligada cortesía, tan esperada como necesaria. También nos encontramos con las difamatorias, venenosas y sangrantes que delatan una envidia malsana del mentiroso hacia el difamado. Está la mentirijilla nacida de la broma entre amigos, que se dice para pasar el rato, tomarle el pelo a quien se sienta a tu lado mientras te tomas un café y acabar con un par de risas y cambio de tema. Y luego está la mentira de mierda. La que tanto te decepciona aunque te la vinieras oliendo (recuerda, es una men-ti-ra-de-mier-da) desde hacía ya tiempo. La que hace que te cambie el concepto que tenías de alguien. Una mentira grande y evidente, descarada, imposible de esconder. Esa mentira muestra la consideración que el mentiroso tiene hacia tu persona. El aprecio que dice que te tiene es mentira. El apoyo con el que creías contar cuando lo necesitaste; mentira. La preocupación que muestra ante tus problemas, bien que le gusta enterarse de ellos; mentira, mentira y mentira.


Cuando abrí este blog me propuse varias cosas, sí. Pero el blog es mío y escribo sobre lo que yo quiera.


Hoy me han mentido.